Los orientales son unos tesos. Desde tiempos inmemorables han contribuido al desarrollo y al bienestar de la humanidad con toda clase de filosofias y artilugios llenos de reflexión, creatividad e inventiva que deslumbran al hombre occidental cambiándole la vida en el proceso. Debe ser su naturaleza reflexiva y meditativa lo que les permite ver cosas donde las otras culturas no ven nada, sólo desorden y caos. Y si la brújula, el compás, la cometa, el fútbol, la imprenta, el yoga y el anime son de las más reconocidas invenciones del otro lado del mundo, Bruce Lee debe estar en completo nirvana con un descubrimiento no tan popular pero tan antiguo como el papel, tan poderoso como la pólvora y tan trascendental como la meditación: El kung fu sexual.
Para entender bien que es el Kung Fu sexual debemos remitirnos al TAO,
el equivalente chino al Zen japonés, el budismo Hindu o el cristianismo occidental, una filosofía de vida que acompaña al ser humano en su viaje espiritual. El TAO habla, entre otras cosas de la unión de los opuestos como la base de la vida, y cómo ésta unión puede ayudarle a alcanzar la plenitud física, emocional y espiritual. Seguramente Ud ha visto el símbolo del TAO: el círculo mitad negro y mitad blanco con pequeños circulos del color opuesto en cada mitad: El yin y el yang, el bien y el mal, la luz y la oscuridad, la salud y la enfermedad o ud y su pareja son el más y el menos del espectro por el cual flota nuestra existencia y por donde oscilan todos sus matices, y donde uno no podría existir son el otro pues hacen parte de la misma unidad.
Es justamente de la rama de la medicina del TAO de la que se desprende el kung fu sexual, que no es más que una serie de técnicas y prácticas destinadas a ayudarle a alcanzar el bienestar y la salud física, emocional y espiritual a través del sexo. Piénselo bien: Eso que le encanta tanto hacer y que ocupa el 95% de su energia mental tiene una finalidad más trascendental y profunda que simplemente intercambiar fluidos, tener el convenido orgasmo pasarla bien un rato. Mucho más liberales que los curas cristianos, para los maestros taoístas el sexo no era simplemente la unión salvaje de genitales e intercambio de fluídos por 5 minutos, a la manera occidental. La sexualidad es todo un sistema de intercambio de energia entre los contrarios y en el cual cada uno tiene lo que el otro necesita para alcanzar y experimentar la verdadera divinidad. Por eso, la sexualidad y la espiritualidad no pueden ir separadas, ya que el sexo no solo nos ayuda a aliviar nuestras enfermedades y sentirnos bien en el plano terrenal sino que nos ayuda a conocer a Dios a través del placer. Que nos sirva de reflexión sobre a quien queremos de intermediario entre nosotros y el altísimo: el curita de la parroquia, buen hombre él, o nuestra pareja, empelota, sudorosa, caliente y deliciosa...
símbolo del TAO
¿Y cuales son esas técnicas? ¿Qué debemos hacer para que el sexo de verdad tenga la capacidad de cambiarnos la vida? Para el occidentalus postmodernus algunas técnicas son fáciles de practicar, otras no tanto. Decida cuáles está dispuesto a hacer y cuáles no, pero mantenga siempre una mente abierta y piense que el sexo es el recreo del alma, el postre de la vida y que está aqui para mejorar nuestra vida.
En la filosofía Tao el objetivo en la relación sexual no debe ser ni el orgasmo ni la eyaculación. El Tao va incluso más allá, pues indica que el objetivo del sexo es la salud mental y física tanto del hombre como de la mujer. Esto puede ser un poco chocante para nosotros, pues en la visión occidental de la sexualidad el fin de la cópula es la eyaculación, para proseguir a echarnos encima de nuestra pareja con un gruñido que delata nuestro cansancio o ponernos a ver fútbol. La idea es utilizar la energia sexual que se desprende del contacto físico y utilizarla en otras áreas de nuestra vida.
Entienda las diferencias entre el yin y el yang, o sea entre Ud y su pareja para complementarse de una manera más profunda: el yin se excita mas despacio y se extingue más despacio también. Yang se excita rápido y se extingue casi enseguida. La mujer necesita mas caricias y juegos previos, mientras que al hombre sólo le basta con ver algo de piel para llegar al éxtasis. Pero la naturaleza es sabia y no creo estas diferencias para armar conflictos en la alcoba y que alguno quede insatisfecho. Es vital conocer a su pareja y la forma y tiempo de su excitación para poder sacar el mejor provecho de su energia.
Preguntele a cualquier mujer cuantos tipos de orgasmo tiene y le va a decir que dos: el orgasmo vaginal y el cliitoridiano. Asi mismo, el hombre también tiene 2 tipos: aquel producido por el pene y el otro producido por la próstata. El orgasmo del pene es el que comúnmente experimentamos, pero el orgasmo de la próstata es infinitamente más placentero y le inyecta una nueva vitalidad a nuestra vida sexual. Existen varias técnicas para estimular la próstata que se cubrirán en otro post y que le ayudarán a conocer otras dimensiones del placer.
Dese cuenta de otra cosa sumamente importante: Orgasmo y eyaculación NO es lo mismo. Para poder tener la capacidad de ser MULTIORGASMICOS debemos aprender a separar el orgasmo de la corrida. Ud puede tener los orgasmos que quiera sin tener que venirse. Orgasmo y Eyaculación son procesos físicos diferentes y para los antiguos maestros taoístas cada vez que ud eyacula sus orgamos estan dando lo mejor de ellos porque asumen que están creando una nueva vida, asi que experimentan un proceso de desgaste que no es necesario sufrir, a no ser que ud este efectivamente creando una nueva vida o sea actor porno. La eyaculación nos deja agotados, cansados, experimentando la "pequeña muerte" como la llaman los taoístas, y con ganas de simplemente acostarnos a dormir. Aprender a tener un orgasmo sin la necesidad de venirse es una de las técnicas que enseña el kung fu sexual para mantener la erección por mayor tiempo y la energía sexual durante todo el día. Más adelante daremos algunos consejos para lograr controlar la eyaculación.
Haga ejercicios de meditación. La meditación le ayudará a silenciar su mente y a no utilizarla cuando no la necesita. Tendemos a preocuparnos excesivamente por las cosas y nunca paramos de pensar, y dejamos que el estrés y la ansiedad nos controlen la vida. Y aunque se supone que el sexo hay que disfrutarlo y no pensarlo, muchas veces creamos bloqueos mentales que no permiten que nos relajemos y disfrutemos, que es efectivamente cuando mejor desempeño vamos a tene. "Estoy muy gorda, lo tengo muy pequeño, no soy atractivo etc..." son algunas de nuestras preocupaciones más comunes, cuando lo más importante es dejarse llevar y ponerle actitud a lo que se haga. La meditación es un ejercicio en el cual por medio de la concentación y una respiración eficaz podemos calmar nuestro dialogo interno y entrar en contacto con dimensiones personales que ni siquiera sabíamos que teníamos. En pocas palabas, nos ayudará a disfrutar más del momento presente y a encontrarle otra dimensión al placer, una dimensión más profunda y sensible. No piense tanto las cosas y mucho menos con su pareja, haga ejercicios de meditación y concentración y aprenda a vacíar su mente justo en los momentos de mayor pasión, donde ya siente que se va a venir.
Aprenda a respirar. Respirar bien es vital no solo para una buena vida sexual sino para nuestro bienestar general. Comunmente respiramos con el pecho y los hombros y con pequeños movimientos de la caja toráxica apenas llenado de oxigeno los pulmones, pero la forma natural de hacerlo es inspirando el aire por la nariz y llenando completamente el vientre de oxigeno de forma que sobresalga ligeramente mientras se va llegando hasta el fondo de los pulmones. No tienen que ser movimientos ya demasiado acentuados, simplemente tratar de que el oxigeno se expanda por nuestro vientre y relajándonos al mismo tiempo. Unos simples ejercicios diarios nos pueden ayudar a acostumbrarnos a respirar mejor y utilizar la respiración en los momentos de mayor excitación. Esta técnica muy seguramente retardará el orgasmo y le ayudará a controlar la eyaculación.
Familiaricese con el concepto de energia, y sobre todo cómo funciona en su cuerpo. Nuestro cuerpo está lleno de energia: eléctrica que regula nuestras células y cerebros, quimica que realiza las complicadas operaciones de hormonas y enzimas, física y quimica regulando nuestros actos y cómo nos relacionamos con los demás, eléctrica recorriendo todo nuestro cuerpo...en fin, somos una gigantesca máquina energética, y es posible que la energia sexual sea la más potente de todas., pues tiene la capacidad de crear vida. El secreto de las técnicas orientales taoístas es saber como controlar la circulación de esa energia por nuestro cuerpo y así poder utilizarla durante el sexo y también en nuestro diario vivir, aumentando nuestra creatividad y disposición para hacer las cosas.
